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Francisco del Rivero

Si hablamos de la Revolución de Cochabamba del 14 de septiembre de aquel 1810, no podemos dejar de nombrar a Francisco del Rivero, quien con Esteban Arze y Aniceto Padilla forman parte de los próceres de esta cruenta batalla independista, a la que nosotros como generación actual debemos rendir tributo y loor. Y qué mejor manera que conociendo más sobre este episodio de magnitud trascendental y de una de sus principales figuras: Don  Francisco del Rivero.

Juan Francisco del Rivero Muguertegui, fue hijo primogénito del General español Francisco del Rivero y de la cochabambina Doña Marcela Muguertegui; nació el 16 de abril de 1758 en la Villa de Oropesa (ahora Cochabamba). Se casó con Doña Sebastiana Nogales, con ella tuvo ocho hijos, de los cuales murieron cinco a temprana edad. Sus tres descendientes serian: Manuel Mariano, Teodoro y María.

De carácter fuerte y pletórico en coraje, probablemente fruto de la fusión que había en sus venas; sangre española y boliviana.  “La juventud de Rivero, dice el señor Viscarra, se señala por su tendencia a la emancipación” (URQUIDI 1943:28)   

Fue católico devoto que incluso llegó a realizar peregrinaciones, como la que efectuaría hacia Choquecamata para recuperar una imagen de madera del Justo Juez, que actualmente se venera en la Iglesia de San Miguel de Toco, donde levantó la construcción de una capilla con esta advocación.

Vida política y militar

El 15 de febrero de 1783 sería Capitán de Infantería del Real Ejército, posteriormente Comandante de Caballería en 1802 y un año después Alcalde Provincial. A lo largo de una carrera militar en una época de agitaciones políticas, ánimos caldeados y vapores de revolución, el 14 de septiembre de 1810 sería una fecha histórica.

En agosto de 1810 el Gobernador Prada instruyó a Francisco del Rivero y a los oficiales Esteban Arze y Melchor Guzmán “El Quitón”, emprender la marcha hacia la ciudad de Oruro para sofocar la insurrección indígena liderada por Victoriano Titichoca. El presidente de la Audiencia de Charcas, Vicente Nieto, había ordenado tropas en Potosí para hacer frente a los revolucionarios que venían desde Buenos Aires. Francisco del Rivero y sus oficiales prefirieron retornar a Cochabamba el 6 de septiembre y levantarse en armas el 14 de septiembre.

Los que otrora hubiesen sido del bando de los realistas, pasarían luego a formar parte en la filas de los patriotas. Muchos consideran que el cerebro de la revolución fue Rivero por contar este con grandes habilidades estratégicas y estar dotado de facultades intelectuales muy altas. Así fue que el 19 de septiembre de 1810 un cabildo nombró a Don Francisco del Rivero Jefe Político y Militar del levantamiento y a Esteban Arze Jefe del Ejército.  El 21 de noviembre, la Junta de Buenos Aires nombró a Rivero Comandante del flamante Regimiento 7º de infantería (Regimiento Cochabamba) y el 9 de enero de 1811 lo ascendió a Brigadier General.

Rivero se replegó a Cochabamba el 29 de junio de 1811 para enfrentar con Arze a Goyeneche, entretanto se precipitó la derrota de Amiraya el 13 de agosto. El pueblo acongojado se sumió en el clamor, Rivero tuvo una entrevista con Goyeneche el 14 de agosto en la hacienda de  Chimba, el jefe de las tropas realistas le reconoció el rango y Francisco del Rivero retornó a Cochabamba con una disposición conciliadora, determinado a proteger a la población. 

“Se habían insurreccionado los pueblos de Pacajes, Larecaja, Omasuyos, apoyados, al inicio, por 800 cochabambinos, provistos de armamento otorgado por Francisco del Rivero en Cochabamba en agosto de 1811, antes de la batalla de Amiraya. Numerosas fuentes documentales muestran la participación de Cochabamba en los enfrentamientos bélicos que libran los indígenas contra las tropas realistas” (AHORA, Bicentenario Heroínas de la Coronilla 2012).

Fue destituido por Cornelio Saavedra, ya en ese entonces Rivera se mostraba receloso tanto de Lima como de Buenos Aires, y siempre manifestaba una actitud política independiente, probablemente a esto se atribuye el sentimiento de animadversión hacia su persona por parte de los historiadores argentinos.

El 19 de abril de 1812, Belgrano emite una orden de arresto contra Rivero, encomendada a Mariano Antezana y a Esteban Arze.- Orden que no llegó a cumplirse  por el prestigio  que gozaba la ilustre figura de Don Francisco del Rivero, además por convalecer este de una prolongada enfermedad que minaba su salud día a día. 

El 14 de junio de 1813 fallecería a causa de un accidente en su casa ubicada en la Plaza de Armas, en lo que ahora es el Club Social.

El Dr. Mauricio García Linera, descendiente de la familia de Francisco del Rivero, indica que en 1825 el gobierno departamental de Cochabamba devolvió el inmueble ubicado en la plaza (actual Club Social) usurpado antes por órdenes de Goyeneche. Manuel Mariano, hijo de Francisco de Rivero fue reivindicado con esta ordenanza, haciéndose así justicia con uno de los principales héroes de la Revolución de Cochabamba.

Así se cerraba una página más de la historia cochabambina y se daba paso a nuevos avatares que este heroico pueblo viviría, pero que sin la histórica revolución no hubieran podido jamás ser posibles, de estos hechos se forjaría el carácter del cochabambino; aguerrido, luchador, tozudo, pueblo de mujeres valientes y batalladoras, llajta abnegada…protectora de sus wawas.  

Cochabamba ha dado grandes hombres al país y a América, en esta ocasión en vísperas de nuestro aniversario septembrino, queremos entregarle los hechos más importantes de nuestros próceres en unas pocas líneas que apenas pueden resumir vidas tan grandes, tan ilustres, arquetipos de valor.  

Francisco del Rivero; un líder nato que este valle vio nacer, junto a grandes hombres como Esteban Arze y muchos más que quizás hayan pasado inadvertidos, héroes anónimos en la historia pero que forjaron aquella revolución por la cual dignamente podemos decir que Cochabamba y su gente fue, es y será un pueblo valiente: “…el primero en la lucha marcial…”

Bibliografía

URQUIDI, José Macedonio: “Hombres del tiempo Heroico”.  2010 Honorable Alcaldía de Cochabamba

ARZE, Edmundo. Los Tiempos 14 de septiembre de 1997

Encuentra esta nota y otras más en la colección de 12 revistas: “AHORA Historias y Leyendas de Cochabamba”