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En la madrugada del 12 de octubre de 1492, tras dos meses en alta mar, un grito rompió el sueño de los aventureros a bordo de la Pinta: “¡Lumbre!… ¡Tierra!”. Fue Rodrigo de Triana quien avistó la Guanahaní: era el descubrimiento de América. Cristóbal Colón, al mando de las tres carabelas: la Niña, la Pinta y la Santa María, se convirtió en el símbolo de una época de exploración y conquista que cambió el curso de la historia mundial.